El blanqueamiento dental es un procedimiento que se utiliza para eliminar las manchas superficiales y profundas en los dientes. A medida que envejecemos, nuestros dientes pueden perder su blancura natural debido a factores como el consumo de alimentos y bebidas, el tabaquismo y el uso de ciertos medicamentos. Sin embargo, existen varios tratamientos para el blanqueamiento dental que pueden ayudar a recuperar la blancura natural de los dientes.
Uno de los tratamientos más comunes para el blanqueamiento dental es el blanqueamiento en el consultorio del dentista. Este tratamiento se realiza en el consultorio del dentista y suele tomar alrededor de una hora. El dentista aplicará una solución blanqueadora en los dientes y luego activará la solución con una luz especial para acelerar el proceso de blanqueamiento. Este tratamiento suele ser muy eficaz y puede dar como resultado un cambio significativo en el color de los dientes.
Otra opción es el blanqueamiento en casa. Este tratamiento incluye la creación de una placa dental personalizada que se llena con una solución blanqueadora y se usa durante un período de tiempo específico. Aunque este tratamiento es menos potente que el blanqueamiento en el consultorio del dentista, puede ser una opción más cómoda para algunas personas.
También existen tratamientos cosméticos no invasivos para el blanqueamiento dental, como el uso de pastas y enjuagues blanqueadores, que son menos potentes pero pueden ayudar a mejorar ligeramente el color de los dientes.